La Pitbull Mulán finalmente encontró a su “Rodrigo”.
Rodrigo se enamoró de Mulán. Le explicamos que se trataba de una raza calificada como PPP (Perro Potencialmente “Peligroso”), lo que implica, entre otras cosas, llevar bozal y tener una licencia. Además, Mulán necesitaba un trabajo previo para coger vínculo y confianza. No presentaba ninguna agresividad, pero sí tenía mucho miedo, principalmente a los hombres (no conocemos su pasado, fue abandonada pero posiblemente también maltratada).
Sin embargo, Rodrigo lo tenía claro: iba a adoptar a Mulán. A pesar de los obstáculos, la resistencia de su familia (que ahora, al convivir con Mulán, se les caen las babas 😉 y la dificultad de encontrar un piso, hoy estamos orgullosos de publicar el final feliz de esta linda historia de amor.
Los perros PPP son uno de los más abandonados y los menos adoptados. La ley no facilita que las personas adopten a estos perros, que acaban estigmatizados por la sociedad. Son perros invisibles, muchos de ellos sociables, cariñosos, fieles y muy inteligentes. Sin embargo, pueden pasar años dentro de un chenil esperando una oportunidad.
Gracias a los voluntarios que se involucraron en la recuperación de Mulán, especialmente a Naroa, que desde el inicio dedicó su tiempo a seguir las pautas con Mulán y recuperarla de sus miedos para aumentar sus posibilidades de adopción. Ha estado pendiente, durante todo el proceso, de que Rodrigo y Mulán finalmente estuviesen juntos.
Gracias a los “Rodrigos” y a las “Naroas”, algunos de estos perros, injustamente calificados potencialmente “peligrosos”, encuentran la felicidad en un nuevo hogar.
¿Próximo Reto? Hera, una Pitbull love, que lleva mucho tiempo en una jaula esperando conocer a su “Rodrigo”. ¿Nos ayudas a encontrarlo?